Un significativo aumento del volumen de lágrimas experimentan los perros al reencontrarse con su amo. Esa fue una de las principales conclusiones de un estudio aplicado a las mascotas por científicos de tres universidades de Japón.
La Guía Central también recomienda:
- El megalodón pudo ser más grande, rápido y voraz de lo que creímos
- Hongos asumen rol protagónico en la descontaminación de las playas
Publicados en el sitio Current Biology, los resultados de la investigación determinaron que la actividad ocular no sucede con un “conocido no propietario”. Por lo mismo, los expertos determinaron que el humedecimiento de los ojos refleja una emoción positiva, al igual como ocurre en los humanos.
Las lágrimas en los perros afloran con el reencuentro de su amo
Las pupilas de los perros también aumentaron en humedad cuando se les aplicó una solución de oxitocina. Ello hizo suponer al equipo científico que la hormona del parto y la lactancia es el “posible mecanismo subyacente” relacionado a las lágrimas. De hecho, la motivación del estudio surgió a propósito de la observación de los ojos de un ejemplar que amamantaba a sus cachorros.
La oxitocina es un neuromodulador en el sistema nervioso central, que afecta comportamientos sociales, sentimentales, parentales y hasta sexuales. Se inyecta a mujeres embarazadas antes y después del parto, para optimizar el procedimiento.
El trabajo sugirió también que “las lágrimas provocadas por la emoción pueden facilitar las conexiones emocionales entre los humanos y sus perros”. Ello, considerando que en las personas la vista se nubla por el llanto ante un estímulo emocional potente.
La Guía Central también recomienda:
Las universidades de Jichi y Keio también aportaron capital humano en esta pesquisa veterinaria. Para medir el humedecimiento de los ojos de los perros se usó la prueba de Schirmer (STT). “Hasta donde sabemos, ningún estudio anterior investigó la relación entre la excitación emocional y el volumen lacrimal en animales”, estimaron los autores.
Finalmente, los científicos sugirieron la posibilidad de que “los canes que muestran ojos llorosos durante la interacción con el dueño reciban más cuidados”. De todos modos, advirtieron que no consiguieron establecer si los perros lloran de tristeza o si lo hacen en la interacción con sus pares.