La actriz Anna Faris atribuyó al fallecido director y productor cinematográfico Ivan Reitman presuntos abusos durante la filmación de My Super Ex-Girlfriend. Los hechos que apuntan al nominado al Óscar por Up in the Air habrían ocurrido en el set en que se rodó la comedia romántica.
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La historia con Reitman terminó con la estrella de la saga Scary Movie “enojada, herida y humillada”, de acuerdo con su relato. El episodio salió a la luz en su podcast Anna Faris Is Unqualified, en el que denunció al canadiense por imponer un “reinado del terror”.
Entre otros abusos, Faris señaló que el también histórico productor de la franquicia Ghostbusters “me dio una palmada en el trasero”. Además, habría incurrido en otros actos violentos en el contexto laboral, como los gritos.
“Una de mis experiencias cinematográficas más duras fue con Ivan Reitman”, sostuvo la actriz de Overboard, Brokeback Mountain, The House Bunny y Just Friends. Posteriormente, confidenció lo difícil que fue “la idea de intentar hacer una comedia bajo ese reino de terror”.
Para la artista, el hombre tras producciones como Heavy Metal, Baywatch y Space Jam: A New Legacy “era un gritón”. Con su comportamiento, era capaz de “tumbar a alguien todos los días… y en mi primer día fui yo”, ahondó.
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Fue la primera vez que Faris mencionó al productor de Ghostbusters, porque anteriormente ya había denunciado los abusos. “Durante una escena en la que estaba en una escalera y se suponía que estaba sacando libros de un estante, golpeó mi trasero frente al equipo con mucha fuerza. Y todo lo que pude hacer fue reírme”, señaló en 2017.
“Recuerdo haber mirado alrededor y observar a los integrantes del equipo diciendo: ‘Espera, ¿qué vas a hacer al respecto?’”, apuntó. En definitiva, Faris descartó publicitar los supuestos abusos. “No le habría hecho eso al protagonista masculino”, protestó.